En ocasiones la vida consiste en tratar de desvelar el sentido oculto de las palabras. "No me considero ateo. El ateo se priva de Dios, de la enorme posibilidad de admitirlo no tanto para sí mismo cuanto para los otros. Dios no es una experiencia, no es demostrable, pero la vida de los que creen en él, la comu-nidad de los creyentes, sí es una experiencia. No, no soy ateo.