Una novela literaria y poderosa que recupera la voz silenciada de Marcela de San Félix, hija de Lope de Vega, en un vibrante retrato del Siglo de Oro desde el ángulo más humano, íntimo y descarnado.Madrid, agosto de 1635. En la estrecha calle que conduce al convento de las Trinitarias, la multitud espera el paso de un cortejo fúnebre. Se ha modificado el recorrido para que una monja de clausura pueda salir al pórtico para despedirse. El difunto no es otro que Lope de Vega Carpio, el Fénix de los Ingenios. La mujer que asoma tras las rejas del convento, sor Marcela de san Félix, su hija.
Nacida de la pasión entre Lope y la actriz Micaela de Luján, Marcela creció junto a su madre y su hermano Lopito entre escenarios y ausencias. Aprendió de memoria los versos de su padre recitados por Micaela antes incluso de saber leer, y buscó desde pequeña la educación negada a las mujeres para continuar con un legado literario prohibido para toda hija ilegítima.
Esta primera novela de Fernando Bonete Vizcaíno, escrita con un dominio inigualable del estilo, del tiempo histórico y de la emoción, explora la relación entre padre e hija, y recorre parte de la vida de Lope de Vega y la de su hija Marcela, quien para cumplir con su vocación literaria y convertirse en escritora tuvo que transformar la celda del convento en esa «habitación propia» que le permitió resguardarse de una madre resentida, de una amante despechada, de una esposa humillada, de un marido burlado, de un noble desterrado, de un sacerdote en pecado y de su ilegitimidad misma.