Las memorias de un político que no ha olvidado sus humildes orígenes ni calla lo que ha visto, aunque no sea políticamente correcto. El muchacho listucu que en los años cincuenta pastoreaba ovejas en las laderas de Peña Labra se convertiría en 2003 en presidente de Cantabria. Esta es su historia. Y nos la cuenta con ese estilo nico que lo ha hecho popular y querido, con sentido del humor y naturalidad.