La obra de Guillermo Contín es recomendable no solo por el
interés de su objeto el misterio de la Ascensión de Jesucristo,
sino también por el modo en que él lo aborda y lo trata. Este es
realmente revelador de lo mejor del tomismo contemporáneo, por
dos razones principalmente. La primera es que el autor ha elegido
estudiar el tema de la Ascensión, no de forma prioritaria en la
Summa theologiae, sino en la Lectura o comentario de santo
Tomás al Evangelio según san Juan. Privilegiando este comentario,
el autor se inscribe en la prometedora perspectiva del «tomismo
bíblico».
La segunda razón que hace de este libro un signo de la vitalidad de
los estudios tomistas se refiere a su finalidad propiamente teológica.
En efecto, el autor no se detiene en la reconstrucción lo más exacta
posible del pensamiento del Aquinate (lo cual sería ya muy digno
de estima), sino que pretende proponer los recursos de santo
Tomás con miras a una inteligencia actual de la fe. Se trata de
poner por obra este «tomismo vivo» que recomendaba el papa
Francisco a los participantes en el XI Congreso tomista
internacional, en septiembre de 2022. La obra de Guillermo Contín
Aylón, porque quiere contribuir a la reflexión contemporánea sobre
la Ascensión con ayuda de la teología del Aquinate reconstruida en
toda su amplitud, responde, a mi parecer, a este hermoso
programa.